Más-caraaaas!

El curso se dividió en dos, uno haría mascaras de yeso y el otro grupo crearía el blogger, en realidad eso se suponía porque al final no se pudo ya que la sala de computación estaba ocupada con los estudiantes de medicina. a mi me toco en el grupo de las máscaras, me entusiasmaba mucho la idea, ya siempre me han encantado y más cuando son creadas por uno, tener la libertad de pintarlas como mejor nos parezca, explayarnos con ella y lo bellas que se ven terminadas. la clase partió... la profesora, luego de pasar la lista nos dio un par de instrucciones, a los pocos minutos llego el segundo grupo a nuestra sala, al que le tocaba hacer el blogger, diciendo que no tenían sala de computación y que el profesor los había mandado a nuestra sala para hacer mascaras con nosotros, pero la profesora dijo que no tenía suficiente material como para unir a los dos grupos, por lo tanto se quedaron afuera sin nada que hacer. Nosotros nos dividimos en pequeños grupos para ayudarnos mutuamente, la profesora sugirió que en cada grupo hubiese alguien que ya hubiese hecho anteriormente mascaras para  ayudar a los demás compañeros.  Nos entregaron los materiales correspondientes a cada grupo, un rollo de yeso, tijeras (para cortar el rollo en tiritas de yeso) un pote para el agua (en el que remojaríamos la tela de yeso para poder moldearla en la cara del que le estuvieran haciendo la máscara), papelitos para cubrir completamente los ojos y cejas (y así no nos entrara agua ni yeso) y mucha vaselina para echarnos en la cara antes de comenzar. Se acostaban como dos compañeros por mesa y entonces ¡manos a la obra!. Cuando me empezaron a hacer la máscara, la profesora dijo que éstas deberían ser con los ojos tapados, no me gustó mucho la idea porque yo quería con los ojos destapados, me encanta que te la puedas poner y ver sin problemas, aparte que con los ojos tapados no quedan tan bien moldeados los ojos, pero en fin, me la hicieron con los ojos tapados como lo habían indicado, cuando terminaron de hacerla, la profesora me dijo que la hubiese podido hacer con los ojos destapados pero que ella, con un propósito definido, la quería a ojos cubiertos, por lo que a mi primera compañera que me toco hacerle la máscara se lo hice a ojos descubiertos. Eran como las 4 de la tarde cuando la profesora nos empezó a apurar, diciendo que termináramos luego con los compañeros que faltaban por tener echa su máscara, en algunos casos habían hasta 3 personas ayudando a terminar la máscara de un compañero, pero terminamos todos casi al mismo tiempo con aquellos compañeros que faltaban. Las máscaras las guardamos en una sala para posteriormente en otra clase pintarlas y terminarlas.